Desde Carmelo hasta Colonia
Pues llegue a Carmelo a las 12, y viendo que es un pueblo durmiendo,
tome un café y seguí por la ruta. Por el cajero automatico tuve ningún sencillo. Pues al
principio el dueño del bar me dio un montón de billetes, y en fin fue al lado
pedir cambio. De verdad en verano este lugar puede ser agradable, con el paseo
al lado del rió y por el parque al lado del puerto. Pero este martes hacia
frió.
Pregunte mi camino al dueño del bar, muy simpático, y pues a la
policía. Hay que quería escaparme lo mas posible de la ruta 1. Entonces tome la
ruta de tierra para el Cerro. A decir verdad, este cerro no es más que una
pequeña colina, un poco escarpa, altura 100m. Después me equivoque, doblando a
la derecha demasiado temprano. Por suerte fue solo 500m demasiado. En fin
encontré la estancia, una casa antigua de estilo clásico, y su capilla barroca.
Todo al alrededor es colinas bajas, con campo, pastos, vacas y ovejas, Grupos
de árboles son planteados al lado de las granjas, y por los pastos. Lo más son
laureles, eucaliptos, y pinos. Ya crecen unas palmeras. Y también en los
jardines ya hay naranjas y limones. Y después llegue a la ruta 1. Aquí pregunte
mi camino a 2 caballeros, y me desaconsejan de seguir por la punta de oro, que
voy a perderme, por falta de carteles. Entonces tome la ruta 1, hasta el
crucero para Conchilla. El paisaje no cambia mucho. La ruta es rodeada de
eucaliptos o pinos. A veces hay lugares abandonados, y revuelve la pampa
originel. Aquí crecen matorrales pequeños y pajas grandes, esparcidos, y
aparecen piedras. Al lado de los riachuelos crecen sauces y me parece riñes,
inclinados sobre el agua. Los eucaliptos son llenos de nidos muy grandes
construidos por los loros verdes. Después hice 15km en el campo, para llegar al
camping a orillas del rió, a puerto Conchilla. Pues Conchilla es un antiguo
pueblito ingles con casas típicas de una planta, que forman una línea
continuada al largo de la ruta. Las paredes son de piedras, cubiertas de
cimiento blanco, muy espesas. Ahora los techas son de metal, pero antes fueron
de paja.
Y en fin el puerto es solo unas casas, una playa, y una ruta que
sigue la costanera con pinos y playas. Arme la carpa, toque mandolín y fui a
admirar la puesta del sol sobre el rió. Después los dueños me propusieron de
sentarme en el bar al lado del fuego. Pero se pusieron ante la televisión
después de unos minutos. Como no puedo aguantar eso, revolví en el frió, par
calentar mi sopa y comer y acostarme temprano.
El día siguiente revolví a la ruta 1 durante bastante kms, y durante
los 25 últimos kms me escape por una ruta de tierra paralela. El paisaje no
cambia mucho, solo que hay a veces viñas. El vino del cerro de San Juan esta
muy rico, ya ya lo probé en Colonia.
Aquí la ruta siempre sube y baja, por colinas y colinas, sin ningún
plano. Y el viento es malicioso, no tanto fuerte, pero siempre de frente, que
voy hacia el rió, por el oposito, o por el este. Es bastante agotador.
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