Chile 75 Villa O higgins hasta la frontera

Villa O higgins

Villa O higgins mismo no es nada mas que un pueblito, un barrio y el centro con dos iglesias antiguas en madera. 

Pero es rodeado por todos lados por montanas cubiertas de bosquetes, con el tope blanco, y esta a orillas de un rio ancho, lo que le da una belleza. 

infelizmente nunca se acabo de llover, y casi siempre todo fue escondido por la neblina. 

En el hotel, cuando llegamos, nos quedamos bastante tiempo en la cocina, cerca de la calefaccion de lena, a calentarnos un poco. despues nos duchamos, cambiamos de ropas, pusiendo todas a secarse atras de la calefaccion, y cenamos aqui. 

 El dia siguiente fui al principio comprar mi billete para el crucero del lago en barco, y despues hacer mis compras de comida por unos dias.

Desde Villa O Higgins hasta la frontera 

Salimos juntos por la aurora, seguimos en bici el rio por un camino de ripio, durante 8 km, hasta el puerto y el barco. Aqui nos encontramos con otra pajera en tandem y el italiano, y unos mochileros. 

Ya teniamos de llevar las bicicletas a mano en el barco, por un escalera y una pasarela estrecha, y despues arriba de la clausura del barco, porque la muelle no llegaba a misma altura que el puente del barco. 

Las bicicletas fueron agarradas a fuera, y nosotros fuimos en una cabina. 

Despues entramos en el fiordo y salimos en un frio helado de la cabina solo para sacar fotos. El fiordo eta rodeado de las montanas, agua gris, verde de los lingas, blanco de las cimas, y olas que limpiaron las bicicletas. 

El barco sirvio de correo, y se paro un par de veces en una bahia para dejar algun paquete a una finca. Los declives caigan muy abrupto en el agua, y solo un camino estrecho se adivino durante unos kilometros, y despues solo se puede ir de barco. 

Que soledad, en este frio, lluvia, y selva. La vista cambio poco, pasemos ante un brazo del fiordo, pero estaba demasiado lloviendo. 

Y llegamos al otro muelle, en Candelario, unas casas perdidas en el bosque, un camino y nada mas. La lluvia se paro y sali un poco el sol. 

Descargamos las bici y fuimos hasta los carabineros chilenos, dos kilometros mas lejo, atraviesa del bosquete y luego de la estepa. 

Ya tenia que empujar la bici, caminando, porque las subidas estaban muy fuertes. Me pare para admirar la ultima vista del fiordo, grande lago azul entre los declives verdes que se reflejan en el agua. 

Todo corria bien hasta el puesto de carabineros chilenos, aqui descubrimos que cuando entre en chile, los carabineros se equivocaron. Los argentinos me daron un visado y un sello de entrada, y los chilenos un sello de salida. Entonces parecia que nunca entre en Chile. demoraba 2 horas para que al final los carabineros acceptaron de dejarme pasar, cerrando los ojos sobre este equivoco, a ver como estaria complicado para ellos y yo para arreglarlo de verdad. ir a Santiago, papeletos, etc... 

 Despues son 10km de camino limpio, con 6 km de subida bravisima, pero bueno.