Coquimbo
Coquimbo es de otro tipo. Esta sobre una colina, con escaleras largas que suben, blancos, con arboles que le rodean. Las casas son de todos colores, como en Valparaíso, pero no tantas bonitas. Es mas un pequeño puerto, ahora olvidado, que solo sirve para la pesca. Y los barcos son amarillos, de madera, esperando en el puerto la hora de salir. Pues en el puerto lo bonito también son los pelicanos que vuelan a orilla del mar, o que se quedan para descansar sobre barcos.
Le aconsejo la vuelta en ferry hasta la isla. Vemos toda la colina, la parte antigua, atrás del puerto, y también la parte nueva, al otro lado de la colina, sobre las rocas y acantilados naranjos y amarillos, que caen directamente en el mar. Acá fue el antiguo fuerte español, ahora reconstruido, y también el puerto de los piratas. La isla sirve de aire de descanso para los pájaros, pelicanos y otros, y para los leones del mar, que duermen y juegan con las olas. Es toda cubierta de animales. Es una alegría de ver eso.
Pues se debe conocer el barrio ingles, bien mantenido, que esta después de la iglesia. Son casas de todos colores, con decoraciones al alrededor de las ventanas y de las puertas, casas de madera, con balcones, una plaza simpática, y el edificio de las aduanas, de puro estilo decorativo.
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