De Comarapa a Epizana
Aquí se acaba el asfalto, y viene un ripio malo, con muchas piedras y arenoso. Empezó una cuesta brava y larga.
Por la subida se ve todo el valle de Comarapa que se va entre los cerros altos. Luego se ve la laguna de la presa, con las barrancas que se reflejan en el agua. Y adelante se ven los cerros, perdidos en una nube inmenso.
Por medio cuesta esta Torrecilla, un pueblito con tiendas. Aquí pregunte como esta la ruta adelante, me respondieron vagamente, ondula. En realidad mejor tomar un bus hasta Pojo, es una locura.
Hasta el tope, unos km mas, se pasa bien, aparte que tenia de empujar la bici, como a menudo en Bolivia. Arriba están unas casas.
Luego viene una bajada liviana, y el camino cambia barro y de una vía. Sopla un viento fuerte y helado. Tenia que llevar la bici en el barro para dejar pasar camiones. Un poco mas y la ruta cambia de piedras con una capa fina de barro, que pega y ensucia todo la bici.
Entre en los nubes, y se puso a llover una lluvia fina y fría. La vista es muy corta. Sigue soplando el viento loco. Los declives se hacen barrancas. Pues tanto que bajar, frenando se puede, cuidando de no glissar. Ya es peligroso y difícil.
Pero la subida, 20km, resulta pesadilla, empujando la bici, mojado, sucio, patinando en el barro. Se añade el efecto de la altura, el viento, los pies torzados por las piedras del camino.
A las 6 de la tarde, poco tiempo antes de la noche, y a 3 km del fin de la neblina, y a 5km de un pueblito, una hora mas, cuando un camionero me recogió. El camionero me llevo 50km.
Sigue la subida hasta Churros, igual brava. Luego viene una bajada de 30km hasta Pojo, con partes de barro de nuevo. No vi nada del paisaje, que ya estaba noche. Solo se veían las luces del pueblito, muy a bajo.
Pojo es un pueblito, una calle no mas, con todos servicios. Y viene otra subida con pendiente, pero a veces con ripio bien liso, y todavía este viento loco. Llegamos a un pueblito al tope, adonde me dejo, y adonde arme la carpa, en el mercadillo.
Por el amanecer, vi que el paisaje había cambiando todo. Se acabo el monte, y estamos en al puna pura, por la estepa, 3000m de altura algo así. Se ven todos los cerros cubiertos de estepa amarilla, con arena gris, al alrededor hacia la lejanía. Al fondo el valle alargado serpentea entre las sierras.
La ruta sigue quedándose por la altura, baja y sube aun más alto. Son caseríos y casas desparramados, y vistas de los cerros grises.
También están valles de altura, con pastos y cultivos de trigo amarillos, tanques de agua para la irrigación por las faldas, y un arroyo al fondo. Crecen eucaliptos y pinos planteados, ceibos, pimientos y algarrobos.
Una ultima subida y reaparece el asfalto, milagro. Pues desde el tope se ve un pueblito muy cerca, pero no es Epizana. Este es un poco mas adelante por la bajada. Y no es más que un pueblito, con todos servicios básicos. Aquí también sale la ruta hacia Totora, Mizque, Aiquile, Puente Arce y Sucre.
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